Después de años de batallas en los tribunales, Sony ha aceptado pagar a los usuarios por la retirada en 2010 del soporte para Linux en Playstation 3 mediante una actualización de firmware.
La compañía japonesa decidió por entonces retirar una de las funcionalidades de la consola ante la evidencia de que era una de las vías que estaba utilizando la scene para explotar la consola más allá de lo permitido por ellos.
En la sentencia, que se puede consultar en este PDF y que todavía debe ser ratificada por el tribunal de California, se especifica que Sony tendrá que pagar 55$ a cada usuario que pruebe que había usado Linux en su PS3, más otros 9$ a los que se compraran la consola con este motivo entre los que le empujaron a pasar por caja en su día.
Los usuarios que pueden beneficiarse de esta sentencia son los que compraron una PS3 entre el 1 de noviembre de 2006 y el 1 de abril de 2010, unos 10 millones de usuarios que han representado una firma de abogados que, con todo este litigio, se embolsarán unos 2,25 millones de dólares.
Vía Arstechnica.