Sony acaba de lanzar en Europa una versión revisada de la PS5 sin lector de discos que llega con menos almacenamiento interno… pero al mismo precio.
Según ha confirmado Austin Evans en su desmontaje, este nuevo modelo incluye un SSD de 825GB en lugar del de 1TB que vimos en la primera revisión de 2023.
Y ojo, de esos 825GB solo son utilizables 667,2GB tras descontar el sistema operativo y las apps preinstaladas. En comparación, la PS5 Slim Digital con 1TB dejaba 848GB de espacio real, lo que supone una reducción del 27% en la capacidad útil.
Lo más llamativo es que este recorte no viene acompañado de una rebaja en el precio. El modelo cuesta exactamente lo mismo: 499 euros en Europa.
Recordemos que, en su lanzamiento en 2020, la PS5 Digital costaba 399,99€, subió a 449,99€ y después a 499,99€. En apenas cinco años, la edición digital ha aumentado 100 euros en precio y ahora ofrece menos almacenamiento que antes.
En cuanto a cambios estéticos y de diseño, esta revisión luce un acabado mate en la carcasa, que evita las huellas dactilares, y es unos 100 gramos más ligera que la anterior Slim (y 1,3 kg más ligera que el modelo de lanzamiento).
Internamente también hay ajustes: el ventilador es más ligero y la placa base se ha rediseñado para ser más fina, manteniendo la misma potencia y rendimiento.
Sony no ha explicado el motivo de esta decisión, aunque en sus comunicados recientes ha insistido en la “difícil situación económica” global para justificar subidas de precios. Lo que sí está claro es que fabricar este modelo resulta más barato para la compañía, aunque ese ahorro no se traslada al consumidor.