Se cumplieron los pronósticos y los coreanos de Samsung White se ha convertido hace unos minutos en el campeón del mundo de League of Legends tras ganar 3-1 en la gran final a los chinos de Royal Club, que pierden su segunda final consecutiva, ya que el año pasado cayeron frente a SK Telecom T1.

Como decíamos ayer, la final se ha jugado en el Sangam Stadium de Seúl, Corea, con un llenazo espectacular y una organización que dice mucho en favor de Riot Games.

Samsung White se ha embolsado el premio de un millón de dólares, mientras que Royal Club se «tiene que conformar» con 250.000 dólares. La semana pasada, los dos semifinalistas perdedores, Samsung Blue y OMG, se llevaron a la saca 150.000 dólares cada uno de ellos.

El cuadro de la competición finalmente ha quedado así a partir de cuartos de final:

Sin título-1

Podéis ver la partida repetida narrada en español aquí mismo:

Es increíble lo que ha conseguido Riot Games tanto con League of Legends como juego en si, como en el espaldarazo que está suponiendo para los eSports por seguimiento y organización.