Microsoft ha confirmado que el próximo 16 de octubre llegarán al mercado los ROG Xbox Ally y ROG Xbox Ally X, fruto de la colaboración entre ASUS y Xbox.
Eso si, los de Redmond no han querido dar el precio oficial todavía de ambas máquinas debido a «condiciones macroeconómicas globales». Desde hace unos meses circula el rumore que costarían 599€ y 899€, respectivamente.
Ambos modelos están diseñados para ofrecer una experiencia portátil de nivel consola, con la comodidad de Windows 11 y una interfaz adaptada al juego.
La integración con Xbox Game Pass, Battle.net y otras plataformas permitirá tener siempre a mano una biblioteca de juegos unificada, ya sea para jugar de forma nativa, vía nube o mediante Remote Play desde la consola.
Además, cuentan con un botón Xbox dedicado que abre un overlay especial para acceder rápidamente a la biblioteca, chatear o gestionar el sistema.
El Xbox Ally estándar llega con el procesador AMD Ryzen Z2 A, equilibrando potencia y consumo para sesiones largas sin comprometer la experiencia. Por su parte, el Xbox Ally X apuesta por lo máximo: procesador Ryzen AI Z2 Extreme, 24GB de RAM, 1TB de almacenamiento, batería de 80Wh y gatillos hápticos, pensado para quienes buscan un rendimiento superior tanto en casa como fuera de ella.
Junto al hardware, Microsoft presenta el Handheld Compatibility Program, que indicará si los juegos están “Handheld Optimized” o “Mostly Compatible”, facilitando que cada partida se ajuste automáticamente al formato portátil.
Esto se suma a nuevas funciones de IA como el Auto Super Resolution, que llegará más adelante y permitirá escalar juegos a mayor resolución sin esfuerzo, o la creación automática de clips destacados.
La familia Xbox Ally no se queda ahí: se esperan actualizaciones periódicas con mejoras en shaders, compatibilidad de accesorios como el nuevo mando ROG Raikiri II y optimizaciones para el juego en pantallas grandes al conectarse en modo dock.