Tras tirarse prácticamente 2 años tal y como se puso a la venta la última revisión a finales de 2012, Apple se ha decidido, por fin, ha renovar el Mac Mini, su ordenador más básico, pero también el más accesible.

Manteniendo el diseño que tenía hasta ahora, las novedades se centran, obviamente, en el interior. Ahora parte desde un procesador Core i5 de doble núcleo a 1,4 GHz (con Turbo Boost hasta 2,7 GHz) con 3 MB de caché integrada de nivel 3 compartida, aunque se puede optar por montar un Core i7 de doble núcleo a 3. GHz (hasta 3,5 con Turbo Boost), 4GB de memoria RAM LPDDR4 a 1.600 MHz ampliable hasta 16GB.

Ojo con el tema de la RAM, porque Apple ha tomado la decisión de que esta vaya soldada a la placa, lo que signiica que el usuario no podrá cambiarla y tendrá que comerse la que venga con el equipo si o si. Una decisión que no tiene justificación alguna y que encarece mucho el precio del ordenador si tenemos en cuenta que siempre es una buena idea ampliar la RAM que viene por defecto y que los de Cupertino la venden a precio de oro.

En cuanto a gráficos, hay que conformarse con una HD Graphics 5000 de Intel en el modelo más básico, aunque también está la opción de optar por la Iris Graphics, también de intel. Admite hasta dos pantallas a una resolución de 2.560 x 1.600 píxeles.

En lo que al almacenamiento interno se refiere, partimos de un disco duro de 500GB a 5.400 rpm, aunque también le podemos montar un Fusion Drive de 1TB o bien un SSD de hasta 1TB, opción más que recomendada.

Por el lado de la conectividad cuenta con salidas de vídeo digital Thunderbolt, mini DisplayPort, DVI y VGA (mediante adaptador) y HDMI. Además, tenemos 2 puertos Thunderbolt 2, cuatro puertos USB 3, ranura para tarjetas SDXC, puerto ethernet, entrada de audio, toma para auriculares, receptor de infrarrojos, Wi‑Fi 802.11ac y Bluetooth 4.0.

La opción básica tiene un precio de 499€ y está disponible desde hoy mismo.

Más información en su web oficial.