Los rumores en torno a Apple y sus productos, tanto renovaciones de los actuales como de nuevos que podrían estar por venir, siempre son motivo de rumores y especulaciones de todo tipo.

Pero hay rumores y rumores, fuentes y fuentes. El Wall Street Journal, cuya credibilidad queda fuera de toda duda en estos temas, ha publicado que el próximo iPhone, el nuevo smartphone de la compañía de la manzana que veremos dentro de unos meses, sería, en apariencia, bastante similar al iPhone 6/6S.

Esto es noticia porque desde la aparición del iPhone 3G Apple siempre ha utilizado durante dos versiones el mismo diseño, la normal y la revisión S con mejoras internas, y era en el siguiente salto numérico donde veríamos, a las habituales mejoras en las especificaciones, un nuevo aspecto visual para el terminal.

El nuevo iPhone sería en apariencia similar al de los dos últimos años, rompiendo esa tendencia, aunque lógicamente introducirá cambios en su interior que lo diferenciarán del 6S, como procesador más potente, mejor cámara y demás. Pero el WSJ confirma el rumor que desde hace unos meses ronda por medio internet, no tendrá jack para auriculares con el objetivo de mejorar su resistencia al agua. Habría igualmente dos modelos, uno con pantalla de 4,7″ y otro con la de 5,5″, normal y Plus, vaya.

Para el que veremos a finales de 2017, 10º aniversario del teléfono de Apple, si habría grandes cambios en cuanto al diseño, incluida una posible pantalla curvada y un lector de huellas incluido en ella, por lo que dejaría de ser necesario el botón home, algo que parece que lleva buscando Jony Ive varios años.

En septiembre saldremos de dudas de forma oficial sobre el próximo terminal de los de Cupertino, que lo mismo no se llama ni iPhone 7.

Vía Wall Street Journal.